Con la llegada del verano, es crucial tomar recaudos para cuidar la salud. La directora de Salud Perinatal, Niñez y Adolescencia, del Ministerio de Salud, Elvira Quiles, en diálogo con Medios El Independiente puso énfasis en proteger a los grupos más vulnerables.
En épocas de altas temperaturas es importante cuidar nuestro cuerpo de la exposición solar y de las consecuencias que puede traer cuando la misma se prolonga. Más aun con las temperaturas extremas que atraviesan nuestra provincia y la región.
La doctora Quiles, explicó que el cuerpo dispone mecanismos de termorregulación, pero cuanto la temperatura externa aumenta en exceso puede resultar un riesgo para la salud. “La termorregulación es la capacidad del cuerpo de controlar su propia temperatura para mantenerla entre 35,5 °C y 37 °C. Este es el rango ideal de temperatura, y cuando se supera el organismo puede colapsar y tener consecuencias graves para la salud”.
En este sentido detalló que un golpe de calor “se puede definir como un conjunto de síntomas que se producen ante el exceso de calor en el cuerpo”. Los síntomas más comunes son: cefalea, mareos, náuseas, vómitos, sudoración, debilidad generalizada. También existen otros síntomas menos frecuentes por exposición prolongada, como sincope, hipotensión arterial, desorientación, confusión, dificultad para respirar, falta de sudoración, insuficiencia o falla rena, arritmias cardíacas.
GRUPOS VULNERABLES
La profesional destacó que “hay grupos de personas que particularmente tiene mayor riesgo de sufrir un golpe de calor”. Entre ellos remarcó los bebés y niños pequeños, adultos mayores de 65 años, personas con enfermedades crónicas, enfermedad cardiaca, renal o hipertensión arterial, y pacientes con discapacidad, postrados, y/o desnutridos.
Cuando se presentan síntomas de golpe de calor, es importante actuar de manera rápida para evitar que llegue a un cuadro grave para la salud. En este contexto la doctora recomendó: permanecer en un sitio fresco, aplicar compresas húmedas o agua directamente, solo si la persona está consciente, beber agua de a pequeños sorbos, y buscar atención médica inmediata si los síntomas son severos o duran más de una hora.
PREVENCIÓN
Por otro lado para evitar los efectos que el calor tiene sobre nuestra salud, la profesional indicó que es importante tener ciertas precauciones como permanecer dentro de la casa en los horarios pico. En caso de no contar con aire acondicionado, permanecer en los pisos bajos o en las habitaciones más frescas de la vivienda y fuera de la luz del sol. Cubrir las ventanas que reciben el sol por la mañana o la tarde, con cortinas, toldos o persianas, abrir las ventanas durante la noche, usar ropa suelta, ligera (algodón, lino) y cómoda, de colores claros, mojarse con agua fresca en los momentos de más calor.
Señaló la importancia de tomar agua o bebidas frescas bajas en azucares, no gasificadas, además de evitar consumo de bebidas alcohólicas. Además, aumentar el consumo de frutas de verano y verduras que aportan al organismo líquidos y sales minerales; y evitar realizar actividad física al aire libre en las horas de más calor.
En caso de salir a la calle, vestir también con ropa ligera y de colores claros. usar sombrero de ala ancha y mojar ligeramente la cara y la ropa de vez en cuando. Sumado a esto, evitar los trayectos en auto durante las horas de más sol. No dejar a niños o animales domésticos solos en vehículos cerrados; evitar tomar sol (ya que las quemaduras del sol disminuyen la capacidad de la piel de mantener la humedad y temperatura); buscar la sombra al andar y evitar salir a la calle al mediodía.