A pocos días del balotaje presidencial entre Sergio Massa y Javier Milei, el erudito del hip hop, Pluzito, charló con Télam para analizar por qué y cómo se posicionan artistas e influencers mainstream como Lali, Trueno, Wos, Acru y más, en tiempos de elecciones, redes sociales y discursos de odio y cómo eso tiene que ver con la esencia política de no callar del hip hop.
“Algunos cuentan porque tienen el olvido / y no saben contar cuántos son los desaparecidos”, improvisó el rapero Acru el último fin de semana en alusión a los discursos negacionistas de La Libertad Avanza, sumándose a una larga lista de artistas que se pronunciaron de cara al balotaje. Acru se refirió a los dichos de Victoria Villarruel, quien negó, una vez más, la cifra de 30mil desaparecidos, en el debate vicepresidencial de este miércoles con Agustín Rossi. Además, Milei en el primer debate presidencial en Santiago del Estero dijo que "no hubo 30.000 desaparecidos sino 8.753" en la última dictadura militar y que hubo “excesos” y que fue “una guerra” en vez del terrorismo de Estado que cometió crímenes de lesa humanidad en los '70.
“Tanto lo que se dice como lo que se calla, es hacer política”, afirmó Pluzito, divulgador y activista del hip hop, en charla con Télam, en tiempos en los que los artistas eligen mantenerse neutrales y, muchas veces ser tildados de tibios, o tomar el riesgo de opinar y ser agredidos. El experto en hip hop consideró que los artistas “deben, por el compromiso con su público y hasta con la sociedad, alzar su voz”.
El también host de las batallas de freestyle FMS Argentina y de la Red Bull, agregó que “los mensajes de odio y división nos hacen muy mal como sociedad”, en referencia al hate que prima en redes sociales -a las que denomina como las “nuevas calles”-. Un fenómeno que crece tiempos electorales y hacia figuras públicas que eligen comunicar sus ideas.
Acru fue invitado en el show de Wos en Quilmes, en la misma noche que este último redobló la apuesta y confirmó que no se arrepentía de lo que había dicho en un concierto en Morón: “Algunos no entienden lo sincero, que hay pensamientos y palabras más allá del dinero, por eso no pueden entender que digamos lo que pensamos”.
Valentín Oliva, alias Wos, a través del freestyle se había expresado con respecto al reciente acuerdo entre Javier Milei, Mauricio Macri y Patricia Bullrich: “No soy falso león / no rancheo con los gatos / ni me abrazo a un pato". Por esta frase recibió mucho odio en redes e incluso circuló una fake news en la que Duki supuestamente estaba en contra de la opinión del Wosito, noticia que después se desmintió.
Ale Pluz, mejor conocido como Pluzito, aseguró que el hip hop tiene una esencia denunciadora desde sus orígenes, de no callar y de utilizar la música como instrumento contra la violencia, lo que explica por qué la mayoría de los artistas que se están posicionando de forma política pertenecen al trap, al rap, en definitiva, a la cultura urbana. De todas maneras, Pluzito explicó que el hip hop “en los 2020s llegó a ser la música más comercial del planeta, bastante alejada de la denuncia y cada vez más funcional al sistema y la industria discográfica, con excepciones como el caso del sublime Kendrick Lamar”.
Sin embargo, el pionero del freestyle y la cultura sneakerhead en el país, está “convencido de que el hip hop es el fiel reflejo de la sociedad” y que “el hip hop es política”.
Este tipo de mensajes de artistas e influencers se han ido incrementando tras los resultados de las PASO que dejó a Milei como el candidato más votado. Ca7riel, Lali y Trueno fueron de los primeros en expresarse en defensa de la educación y la salud pública, de los derechos humanos y laborales -entre otras cuestiones-, y por ende, en contra de las ideas propuestas por la ultraderechista La Libertad Avanza.
“No podemos decir que no tenemos problemas en Argentina, pero eso no quita que los artistas puedan -y en mi opinión, deban- alzar su voz por el compromiso con su público y hasta con la sociedad. Banco y avalo los mensajes de Trueno, de Wos, de Ca7riel, por nombrar a algunos. Tampoco es que fueron mensajes súper radicales, más bien bastante suaves en comparación con las respuestas opositoras, pero son súper necesarios. Y ahí está la gente, los trolls y los medios, con esta idea de que ‘cobran x por un show y que les conviene que todo se mantenga así’, sin entender muy bien cómo funcionan ni el Estado ni los números de los artistas. Peor que los que hablan me parecen los que callan”.
Así fue el caso de Lali, que no sólo se pronunció horrorizada tras las PASO sino que la noche de las elecciones generales, cerca de las 23, ya con los resultados provisorios, compartió en su red social X “ARGENTINA TE AMO” por lo cual la tildaron de “ensobrada”, por mencionar una de las respuestas menos agresivas que recibió.
Al día siguiente, la cantante y actriz publicó: “Posta hay gente enojada, tirando falacias casi graciosas y perdiendo su tiempo porque puse en mis redes ‘Argentina Te amo’ ???! Jajaja chicos… ‘ARGENTINA TE AMO’ wow.... quiza ahí está el tema... ellos la odian! Argentina te amo siempre”.
Incluso, más de un mes después de las PASO, en Olga, el canal de streaming de Migue Granados, Lali reafirmó su postura política: "Uno es la historia que tiene y yo crecí en una casa en la que la historia de nuestro país y lo que pasó en nuestro país estaban presentes. Es imposible en este momento no expresarme cómo ser social. En un tuit o ahora que estamos hablando de esto".
“La cultura es fundamental y necesaria para la identidad de una nación y en Argentina somos muy ricos culturalmente. Está perfecto que se destine dinero de nuestros impuestos a la cultura para que sea de acceso libre y gratuito para todos y todas, para brindar igualdad de posibilidades. Pero cuando la cobran artistas de otros géneros musicales no veo a la gente tan indignada, ni cuando las pagan organismos de otras corrientes políticas, ni cuando se subsidia a los privados para que lleven adelante sus eventos”, reflexionó Pluzito.
Cantantes como Marilina Bertoldi y María Becerra también se han pronunciado en sus shows en contra de las ideas del espacio de ultraderecha de La Libertad Avanza.
La rockera y ganadora del Premio Gardel de Oro (2019) comentó en el reciente Festival Capital, en La Plata, que votar a Milei es "de homofóbico, racista, clasista, misógino y sobre todo anti-Argentina". Y en otro concierto que dio esta semana en Niceto Club, Marilina dijo “no al fascismo. Que no vuelva la dictadura”, después de que sus fans saltaran al ritmo de “el que no salta vota a Milei”, cantito que también se vio en shows de Wos o en un colmado Luna Park de la banda NAFTA.
En el caso María Becerra, de la joven artista que llegó a la fama en pandemia, no es la primera vez que hace alusión a la maternidad y cómo muchos padres no se hacen cargo de la cuota alimentaria de sus hijos e hijas; una obvia referencia a los dichos de Lilia Lemoine con respecto a dar la posibilidad a los hombres a renunciar a su “paternidad” y las obligaciones que eso conlleva.
“En Argentina el hip hop es reconocido como Industria Cultural gracias a la grandiosa política pública del MICA (Mercado de Industrias Culturales Argentinas). El hip hop ya es parte de nuestra identidad, y ocupa espacios de relevancia internacional como Tecnópolis, el Centro Cultural Kirchner o el Centro Cultural Borges. Es importante que el Estado acompañe, impulse y desarrolle”, afirmó Pluzito.
El también fundador y conductor del podcast "Representar Hip Hop", aportó ejemplos de Estados Unidos -la cuna del hip hop- en donde lo político también se cruza con el mundo de la música: “A Obama le ‘hicieron’ la campaña los raperos. Kanye West viene de postularse a Presidente (y ganó muchísimo hate por avalar a Donald Trump y mostrarse con él). Wyclef Jean en Haití también quiso postularse a Presidente. Hasta 2Pac, el rapero más legendario de todos los tiempos, estaba iniciando su propio partido político cuando fue asesinado en 1996. Otros artistas aparecieron para la foto y obtener beneficios, como el caso de Snoop Dogg y Lil Wayne que se mostraron junto a Trump para que este les “perdone” algunas penas que tenían que cumplir en prisión y para ‘liberar’ a algunos amigos”.
Fuente: Télam