
A través del Decreto 408/2025, el Gobierno nacional eliminó varios programas agropecuarios- vigentes a través de leyes nacionales- de promoción de distintas actividades productivas.
La medida alcanza al Régimen de Promoción de la Ganadería Ovina y de Llamas (Ley 25.422), al de la Actividad Caprina (Ley 26.141), al de Ganadería Bovina en Zonas Áridas (Ley 27.066), al Programa de Producción de Búfalos (Ley 27.076) y sus respectivos organismos asociados.
Según detalla el decreto, estos regímenes beneficiaban a un porcentaje ínfimo del universo de productores, con estructuras administrativas que resultaban costosas e ineficientes.
Esta normativa, impulsada por la Secretaría de Agricultura, Ganadería y Pesca, se fundamenta en “optimizar la gestión pública y reducir la intervención estatal en el sector agropecuario” y a un “enfoque general de desburocratización”.