
El Gobierno de Gaza acusó este domingo a Israel de someter a la Franja a una "muerte lenta" y haber dejado entrar solo un 41 por ciento de la ayuda humanitaria necesaria en los 80 días de alto el fuego.
En un comunicado, el Gobierno gazatí indica que durante el alto el fuego, que entró en vigor el 10 de octubre, las fuerzas israelíes han matado a 418 palestinos y herido a otros 1.141, cometiendo "graves y sistemáticas violaciones del acuerdo" y su protocolo humanitario adjunto.
Entre las 969 violaciones que cita, figuran 298 incidentes de disparos directos contra civiles, 54 incursiones de vehículos militares en zonas residenciales, 455 bombardeos y "ataques selectivos" contra civiles desarmados y sus viviendas, así como 162 bombardeos y destrucción de viviendas, instituciones y edificios civiles.
En el ámbito humanitario, asegura que Gaza "se enfrenta a una muerte lenta", ya que Israel "no ha proporcionado ni siquiera las cantidades mínimas de ayuda acordadas".
En 80 días, afirma que solo han entrado 19.764 camiones de ayuda de los 48.000 que debían acceder (un 41 por ciento), lo que arroja una media de unos 250 al día, frente a los 600 que menciona como necesarios.
"Esto ha provocado una grave escasez continua de alimentos, medicamentos, agua y combustible, y ha agravado la catastrófica crisis humanitaria en la Franja de Gaza", dice el Gobierno.
En cuanto al combustible, denuncia que solo accedieron 425 camiones de los 4.000 que debían entrar, con un promedio de 5 camiones diarios de los 50 que asegura se asignaron en el acuerdo, lo que supone solo un 10 por ciento.
Ello deja a hospitales, panaderías e instalaciones de agua y saneamiento "prácticamente paralizados", indica.