El futbolista uruguayo evitó que un hombre de 49 años se quitara la vida en una playa de la Ciudad de la Costa, en el departamento de Canelones, Uruguay.
El hecho tuvo lugar mientras Suárez caminaba junto a su esposa, Sofía Balbi, durante sus vacaciones y se percató de la delicada situación. El hombre había permanecido casi un día encaramado en un árbol, con una soga atada al cuello, amenazando con lanzarse desde seis metros de altura.
Andrea, integrante de una ONG especializada en crisis emocionales, describió el papel crucial que jugó el futbolista: “Luis me confirmó que es una persona muy humana. Estuvimos abrazando y hablando con este otro Luis que estaba arriba del árbol. Le pedíamos que encontrara un sentido para seguir adelante”.
Las negociaciones duraron 18 horas, en un ambiente tenso y marcado por el frío de la noche. Finalmente, el hombre accedió a bajar del árbol gracias a la intervención de Suárez, la ONG y las autoridades de la Guardia Republicana y la Prefectura, siendo luego trasladado para recibir atención médica y contención psicológica.