La designación de Martín Menem como presidente de la Cámara de Diputados abrió un nuevo frente de tensión en el seno del partido, ya golpeado por el nombramiento de la exministra en Seguridad en el futuro gobierno. La tensión entre la excandidata presidencial y Macri se hizo más evidente, mientras que el espacio se encamina a renovar sus autoridades.
La decisión de la excandidata presidencial Patricia Bullrich de aceptar el cargo de ministra de Seguridad del próximo Gobierno nacional generó una disputa interna en el seno del PRO, mientras el partido apura sus elecciones internas para elegir nuevas autoridades, y se abre un nuevo frente de disputa con La Libertad Avanza (LLA) por la designación del libertario Martín Menem como presidente de la Cámara de Diputados.
Las internas en Juntos por el Cambio vienen de larga data y podría decirse que la coalición opositora ya no existe como se la conoció en los últimos años, aunque el triunfo de Milei no disparó cambios solamente en ella sino también en el corazón del PRO.
En el partido amarillo siguen nítidamente en veredas opuestas las dos facciones que no habían podido lograr una lista de unidad rumbo a las presidenciales, conocidas popularmente como las 'palomas' y los 'halcones', y esta falta de consensos generó que vayan a las PASO entre Patricia Bullrich y Horacio Rodríguez Larreta para elegir quién de los dos sería el candidato.
Pero hasta ahora el núcleo halcón se había mantenido unido, y tanto Macri como Bullrich fueron quienes sellaron con Milei el llamado "Pacto de Acassuso", el acuerdo por el cual ambos respaldaron al libertario rumbo a la segunda vuelta, el balotaje del 19 de noviembre en el que fue consagrado como el futuro Presidente de la Nación.
Ahora, esta unidad entre Bullrich y Macri se vio afectada por turbulencias que se vieron claramente en la última semana.
Macri pretendía una negociación con Milei amplia, que abarcara la designación de varios funcionarios del PRO en su Gobierno y también la discusión respecto de quién conducirá la Cámara de Diputados.
Desde el PRO impulsaban la figura del diputado nacional Cristian Ritondo, aunque también estaban en carrera para ese puesto tanto Florencio Randazzo, quien fuera candidato a vicepresidente del cordobés Juan Schiaretti, como el riojano Martín Menem, principal referente de Milei en esa provincia, quien este sábado fue confirmado para ese cargo por el designado ministro del Interior, Guillermo Francos.
Los cortocircuitos entre Macri y Bullrich tienen que ver con el hecho de que el expresidente considera que Bullrich "se cortó sola" para negociar su propia inserción en el gabinete de Milei.
"No están peleados, pero cada uno tenía una estrategia distinta para plantarse ante Milei y no se pudieron poner de acuerdo", afirmó a esta agencia una fuente partidaria al tanto de los motivos del enfrentamiento.
En tanto, la designación del riojano Menem en la presidencia de la cámara baja abre un nuevo frente de disputa con la fuerza libertaria que gobernará el país a partir del 10 de diciembre.
"El gobierno de Milei eligió un camino que es distinto al de trabajar juntos desde el minuto cero", dijo el vicepresidente del PRO y diputado nacional Federico Angelini esta mañana en declaraciones a radio 10, y agregó que de esa manera "se negociará ley por ley" y no habrá un apoyo a "libro cerrado" de los proyectos que mandé el libertario al Congreso.
Para Angelini, las designaciones tanto de Bullrich como de Luis Caputo en Economía no implican "un acuerdo entre el PRO y la LLA" y precisó: "Es una oferta del Presidente electo Javier Milei hacia Bullrich y Caputo”.
“Vamos a ser una alternativa, no co-gobierno, no hay un acuerdo entre el PRO y La Libertad Avanza, es una cuestión de que el Presidente es Javier Milei, hay que reconocerle ese liderazgo y nosotros vamos a acompañar en el Congreso de la Nación”, dijo.
Los nuevos rumbos del PRO
En este clima, Bullrich se automarginó de la conducción actual y futura del PRO, el partido fundado por Macri en 2002.
La futura titular de Seguridad, que actualmente preside el partido amarillo, ya avisó que dejará ese puesto, en un contexto donde el PRO elegirá en los próximos meses nuevas autoridades.
Por estas horas, según pudo saber Télam, desde lo formal se están apurando los pasos para organizar esta elección interna que determinará la futura conducción del PRO y dejar listo el esquema antes de la feria judicial de enero.
Aquí se replicará lo que ya pasó en el partido en los últimos años: habrá una lista larretista y otra macrista, aunque hay quienes creen que aún es posible llegar a una nómina de consenso.
Entre los posibles candidatos asoman María Eugenia Vidal como representante de las "palomas" y el propio Mauricio Macri como referente de los "halcones".
El cronograma electoral contempla las siguientes fechas: el 13 de diciembre se cerrarán los padrones, el 23 de enero se presentarán las listas y la elección de autoridades se concretará el 17 de marzo, para que las nuevas autoridades asuman recién en abril.
El PRO enfrenta la disyuntiva de establecer su identidad política, en un contexto en el cual una cercanía excesiva con la gestión de Milei lo desperfilaría rumbo a las elecciones de medio término de 2025.
Fuente: Télam