
En una manifestación llevada a cabo en la Plaza 25 de Mayo, la Central de Trabajadores de la Argentina Autónoma- Delegación La Rioja, expresó su más enérgico repudio a la represión ejercida por el gobierno de Javier Milei contra jubilados y ciudadanos que se sumaron a la protesta en defensa de sus derechos.
La organización sindical denunció la "brutal y cobarde" actuación de las fuerzas de seguridad en el marco de una movilización que tenía como objetivo visibilizar las difíciles condiciones que atraviesan los adultos mayores en el país. Según señalaron desde CTAA, los recortes en los haberes de los jubilados y el aumento de la pobreza e indigencia los han sumido en una situación crítica, especialmente en lo que respecta al acceso a medicamentos y servicios básicos.
En un comunicado oficial, la CTAA mostró su solidaridad con los adultos mayores que sufren los efectos de las políticas del gobierno de Milei, a quienes califican como víctimas de un "ajuste económico feroz". La organización recordó que millones de jubilados viven por debajo del umbral de la pobreza, una situación que se ha agravado por las decisiones del actual gobierno.
La manifestación también tuvo como eje central la exigencia de la renuncia de Patricia Bullrich, ministra de Seguridad, por su responsabilidad en el desmedido operativo represivo desplegado en las cercanías del Congreso de la Nación. Con el uso de gases lacrimógenos, palos, hidrantes y balas de goma, el accionar de las fuerzas de seguridad dejó un saldo de varios heridos graves y detenidos.
"Este gobierno ha cruzado los límites de la legalidad y la democracia", afirmaron desde la CTAA. En un tono firme, subrayaron que frente al "autoritarismo" y la "represión", continuarán luchando por los derechos de los trabajadores y de los sectores más vulnerables. La organización anticipó que las calles seguirán siendo un espacio de resistencia frente a lo que consideran un avance sobre las libertades democráticas.
A medida que el clima de tensión crece, los gremios y organizaciones sociales se mantienen unidos, reafirmando su compromiso de no ceder ante lo que consideran políticas que buscan despojar a los más necesitados de sus derechos más fundamentales.