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Acto cultural y participativo para conmemorar el día de los derechos humanos

En el Salón "Coty Agost Carreño" del Paseo Cultural se realizó el acto central en conmemoración por el 77° aniversario de la Declaración Universal de los Derechos Humanos y los 42 años del retorno a la democracia.



La actividad organizada por la Secretaría de Derechos Humanos y la Secretaría de Culturas fue declarada de interés legislativo y municipal y contó con la participación de autoridades provinciales, municipales, organismos de derechos humanos y público en general.

Durante el encuentro se entregaron reconocimientos a los ganadores del concurso “Palabras de Nuestra Memoria” edición 2025, una propuesta que une la literatura y el compromiso social, para promover los pilares de Memoria, Verdad, Justicia y Derechos Humanos.

Así también, se presentó el libro digital que compila los microrrelatos y poesías seleccionadas en esta edición y cuyo link de descarga gratuita estará alojado en la página de Facebook de la Secretaría de Derechos Humanos y del Espacio Provincial de la Memoria.

El cierre de la ceremonia, estuvo a cargo del Coro Polifónico de la Provincia, bajo la dirección de Jorge Sálica, que ofreció una emotiva interpretación de la “Cantata Riojana”, ovacionados de pie por el público presente.

Durante su discurso el secretario de Derechos Humanos, Delfor Brizuela, enfatizó que los derechos humanos y la democracia requirieren una toma de posición activa. “Para estos dos valores, para estos dos pilares de la vida y de la convivencia humana, no hay posiciones tibias, no hay posiciones tímidas, no hay neutralidad”, sostuvo, a lo que agregó que no hay democracia verdadera sin derechos humanos, y no hay derechos humanos plenos sin democracia.

Brizuela remarcó que los DDHH, son transversales y forman parte de la vida cotidiana del pueblo, desde el acceso a la educación, la salud y los servicios básicos, hasta la inclusión de personas con discapacidad, el respeto a los pueblos originarios y migrantes, la defensa de los derechos ambientales y la erradicación de toda forma de violencia.

Así también manifestó que la lucha por la dignidad humana no es solo una cuestión de legislación o escritorio, sino que su "verdadero territorio" es la calle, el pueblo que reclama y la resistencia popular. En ese sentido resaltó la lucha de las Abuelas y Madres de Plaza de Mayo como la fuerza histórica que puso en alto la lucha por los derechos humanos en nuestro país.

 “Derechos Humanos no es un título, es el agua y el alimento de la vida, sin derechos humanos y sin democracia, la vida del ser humano, la vida en comunidad, la vida socializada y compartida, desaparece y nos volvemos entes. Por eso es tan importante sostenerlos como bandera de nuestra acción social, política y de nuestra batalla cultura”, afirmó.

Por último, hizo referencia a “la avanzada” contra la democracia y la crueldad global a la que hoy asistimos, manifestando: “nuestra batalla cultural se da con la palabra, la memoria, el abrazo y el amor, y no con la violencia y el odio”.