
Ayer vimos con estupor, una pala retro, destrozando la escultura de hierro de Osvaldo Bayer en el ingreso a la ciudad de Rio Gallegos, en la patagónica Santa Cruz.
Por Delfor "Pocho" Brizuela
Era un espectáculo dantesco e increiblemente cruel. De a poquito, doblar con furia los hierros, aplastarlos y arrojarlos en el piso con desprecio y desparpajo.
En el soporte de la escultura rezaba: "Osvaldo Bayer, 1927- 2018. Bienvenidx, usted está ingresando a la tierra de la Patagonia Rebelde".
Esa escena es la metáfora realista de un gobierno que deshonra la historia y ejecuta la destrucción y el crimen sitemático del otrx. Como en la dictadura, como en las dictaduras. Su paradigma es violencia, odio, represión y olvido.
Nada bueno y humano puede hacerse, con esta combinación de inhumanidad y tristeza.
Desde los escombros arrojados con saña, con la insolencia amorosa de la rebeldia de los pueblos, reconstruiremos la esperanza, como bandera de lucha, que se levanta, una y otra vez, hasta la victoria de la Verdad y la Justicia.
Osvaldo Bayer: Presente!
Rebeldes de la Patagonia: Presentes.