El licenciado en Psicología, Matías Brígido, destacó en una entrevista como manejar las emociones por las fiestas de fin de año, la demanda de una felicidad constante y comparación provocado por las redes sociales, las frustraciones, angustias y ansiedades por estos días, los balances personales y proyectos para el próximo año.

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Brígido en contacto con Medios El Independiente comenzó explicando “en esta época del año, que para algunos puede ser muy linda, donde nos encontramos con personas, amigos, pero también también puede ser movilizante de stress, angustia, lo que se llama el síndrome de fin de año”.

Precisó que “uno de los puntos clave en esta época del año es el autocuidado, muchas veces nos vamos descuidando, dejándonos al último. Aparece lo urgente, las demandas, el cumplir con los demás y nosotros vamos quedando en segundo o tercer plano. Poder recuperar esto y ponerlo en primer lugar y decir estoy en un momento que estoy estresado, movilizado, angustiado. También está esa demanda de la felicidad, que la vemos en las publicidades, mensajes de redes sociales, y esta demanda de estar feliz en este momento, puede causar mucha frustración a alguien que lo conecta con ausencias, angustias, ansiedades o problemas. No hay que atrapar ese mandato de felicidad”.

Brígido sostuvo sobre las publicaciones de los logros en redes sociales, las comparaciones y su impacto en diferentes públicos, “las redes sociales no llevan a ese fenómeno de compararnos, lo cual es una trampa que tenemos que evitar. Por eso es la importancia de la educación digital, aprender y entender como funcionan las redes y como las podemos utilizar para que las usemos y no nos afecten tanto como nos podrían afectar. Esta comparación aparece siempre y nos va comiendo, generando frustración, angustia y ansiedad. Tenemos que entender que cada persona tiene ritmos, tiempos totalmente diferentes, y cada persona lo que comparte en redes es algo muy pequeño su vida, y nos empieza a generar esta ilusión de que todos somos felices, están bien y yo no. Lo cual no es una visión real, todos estamos en momentos diferentes, por eso hay que evitar la comparación con el otro y tener más un trabajo interno, un proceso nuestro sobre que hemos logrado, hacerlo desde un punto positivo. Qué fue lo que me gustó y lo que me gustaría seguir trabajando de acá en adelante”.

Finalmente, Brígido dijo “lo importante es que nos conectemos con nosotros, entender que eso que estoy sintiendo está bien, sea agradable o desagradable, si transito esta etapa con tristeza, ansiedad, alegría, es válido la emoción. Lo que estoy experimentando tiene una razón de por qué lo estoy sintiendo. Respecto de los proyectos para el año que viene, hay personas que si les gusta ponerse objetivos, proyectos y otras que prefieren el día a día, el momento”.

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