
Hoy, fecha en que la Iglesia Católica conmemora el Día de los Fieles Difuntos, el cementerio El Salvador se prepara para recibir a cientos de familias riojanas que se acercarán a recordar a sus seres queridos.
El director general del cementerio, Jorge Cáceres, informó que el portón principal y los accesos laterales, tanto por calles Guido Spano y Chacha Peñaloza, estarán abiertos desde las 7 de la mañana. Agregó que “se celebrarán dos misas: una a las 8:30 y otra a las 9:30, ambas presididas por el padre Pío Aguilar, de la parroquia Nuestra Señora de Fátima, junto a la comunidad de la Virgen del Carmen del barrio Hospital.
“El cementerio es un lugar santo. Aquí descansan quienes hicieron posible nuestra Rioja, los que nos dejaron una casa, un trabajo, un auto. No hay que tener miedo de ellos”, expresó Cáceres en diálogo con Medios El Independiente.
LLAMADO A LOS DEUDOS
Durante la entrevista, el director planteó “una fuerte preocupación por el abandono de bóvedas y nichos, y pidió mayor compromiso por parte de los familiares”. “Hay muchas situaciones de abandono e higiene del extinto. Hemos tenido que iniciar investigaciones profundas para dar con los deudos”, explicó. “No puede ser que algunos dejen a sus familiares como si fueran cualquier cosa. Hay que tener respeto. Sino pueden hacerse cargo, que se acerquen, que se gestione, pero no se puede mirar para otro lado”.
Cáceres adelantó que “elevarán pedidos al Concejo Deliberante para que se avance con una actualización de las ordenanzas que regulan el mantenimiento de sepulturas y el seguimiento de los casos de abandono”.
TRABAJO SILENCIOSO Y SOSTENIDO
El funcionario destacó la tarea del personal municipal que “mantiene el cementerio de lunes a lunes, pese a las críticas o las difi cultades”. “Ellos están todos los días acá, limpiando, sosteniendo el lugar. Cuando los visitantes se van, ellos siguen trabajando entre el dolor y el silencio. No cualquiera puede hacerlo”, subrayó. “Psicológicamente no es fácil. Hay que valorar el esfuerzo de los empleados y el acompañamiento de sus familias”.
Cáceres relató que “desde su llegada al cargo se abocó, junto a los trabajadores, a ordenar el predio y resolver confl ictos familiares, casos de usurpaciones de bóvedas, y a brindar cristiana sepultura a restos abandonados”.
LAS FLORES Y LA MEMORIA
Como cada año, en los alrededores del cementerio El Salvador se multiplican los puestos de venta de fl ores, que acompañan el ritual de memoria de las familias. Ángela, una de las vendedoras, contó que este año los precios varían entre $ 3.000 y $ 5.000 según el tipo de fl or y el arreglo. “Tenemos claveles a $ 3.000, ramitos a $ 5.000. La gente busca precios accesibles, pero también flores frescas. Gracias a Dios hay movimiento”, manifestó.
Por su parte, “Rosita”, con más de 51 años vendiendo flores frente al cementerio, aseguró que la tradición se mantiene viva. “Lo que más busca la gente son los ramitos. Hay de tres, de cuatro o de cinco pesos. El trabajo viene bien, como en el Día de la Madre, gracias a Dios siempre se vende todo”.
ABIERTO TODO EL DÍA
Las puertas del cementerio El Salvador permanecerán abiertas durante toda la jornada de hoy domingo hasta la tarde, para permitir que las familias visiten las tumbas de sus seres queridos. Aunque en un principio se evaluó abrir el predio el sábado por la noche, la propuesta fue descartada por motivos de seguridad.
Aun así, Cáceres no descarta implementar esa iniciativa en el futuro. “Queríamos abrir de noche, para que la gente pudiera venir a rezar o estar un rato con sus difuntos, pero no se concretó por cuestiones de seguridad. Ojalá podamos hacerlo más adelante. El cementerio no es un lugar de miedo. Es un lugar de respeto, de amor y de memoria”.