ANJULLÓN (Especial). El pasado viernes 20 de septiembre de 2024, a la edad de 89 años, dejó de existir Argentino Getulio Ciriaci, autor de la conocida "Zamba de Anjullón" y de muchas otras canciones y poemas, dejando un importante legado literario para el pueblo.
Había nacido el 25 de mayo de 1935, en Acebal, Dpto. Rosario (a 37 km de la ciudad homónima), provincia de Santa Fe y en el año 1951 ingresó como empleado del Correo.
Más tarde, en 1957, contrajo matrimonio con Nora Constanzo, quien lo acompañó por diferentes puntos del país donde fue “Jefe Relevante”.
En 1973 quería marcharse de Rosario y le dieron a elegir entre tres destinos en la provincia de La Rioja: Patquía, Vinchina y Anjullón, optando por este último. Al principio le costó un poco adaptarse pero finalmente se encariñó tanto que ya nunca más se marcharía.
Finalmente en 1992 se jubiló como “Jefe de Correo” con 41 años y 8 meses de servicio, pero siguió viviendo en el pueblo hasta sus últimos días.
Sobre su obra literaria, Raúl Quintero dijo que “algunos años después de su llegada al pueblo, consustanciado con la gente y el paisaje del lugar, se sintió inspirado y comenzó a escribir. De esta manera nació Zamba de Anjullón y luego un sinfín de canciones, poemas y hasta algunos cuentos”.
Sobre la zamba comentó que “fue cantada en el escenario mayor del folclore en 1976 por el “Dúo de la Costa” (Carlos Garino y Lalo Nieto), quienes representaban a la sede Aimogasta como ganadores del pre Cosquín”.
Esta zamba y otras canciones como “El Costeñito, Volviendo al pago, Recordando la Costa, Prisionero, etc., fueron grabadas por distintos artistas como: Velasco 4, Lalo Nieto, Los Herederos, Antonella Ocampo, Banda Registrada y otros”.
En los años 2018 y 2022, Raúl Quintero publicó la antología “Anjullón Voces para mi pueblo” (Tomos 1 y 2), donde se incluyeron muchos de sus poemas y canciones. Al año siguiente y por gestiones del Cr. Ramón Mercado, pudo publicar su propio libro, el cual fue titulado “De Acebal a Anjullón”, incluyendo casi la totalidad de su obra.
Su deceso se produjo el viernes 20 a las 23 hs. aproximadamente y según lo que había pedido en vida, su cuerpo marchó directamente a su última morada, sin el acostumbrado velorio, pero inundando de tristeza a todo el pueblo, donde seguramente su recuerdo se mantendrá vivo por siempre.