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Peligra institucionalidad por conflicto provincias-Nación

En menos de un día escaló muy fuerte el conflicto, por los reclamos de las provincias ante la no transferencia de fondos, a tal punto que 22 de 23 gobernadores se sumaron al enfrentamiento con la Nación. La respuesta del gobierno de LLA, lejos de buscar un camino de diálogo redobló la apuesta en favor del ajuste y pone en peligro la institucionalidad democrática y hasta la República misma, una de cuyas virtudes es la libertad que, supuestamente, venían a recuperar.



No fue la oposición peronista sino uno de los aliados del gobierno. El PRO partido que lidera el ex presidente Macri no habría conseguido que Milei lo dejara co-gobernar y habría dado vía libre para que el gobernador de Chubut, “Nacho” Torres lanzara un ultimátum contra el gobierno nacional. “Fue ante una multitudinaria marcha de petroleros, camioneros y obreros de la construcción, en Comodoro Rivadavia, este viernes 23 que “no vamos a permitir que nos pisen la cabeza a todos los chubutenses y que nos toquen los recursos que son nuestros: si no hay una resolución a este conflicto, a partir del miércoles no vamos a exportar un solo barril de petróleo más”.

No pasó ni una hora que seis provincias se sumaron a Chubut, con un fuerte comunicado, y el significativo título de “Las Provincias Unidas del Sur” recordando que “son preexistentes a la Nación”; que los gobernadores no son empleados del Poder Ejecutivo Nacional y que están para defender a sus pobladores. “No aceptamos patrones de estancia ni el unitarismo de quienes se creen que van a pisotear a las provincias”. 

No paró ahí la ola de reacciones, el resto de los gobernadores, comenzando por Ricardo Quintela y todos los peronistas se sumaron al chubetense. Quintela, el primero en salir -apenas asumido el presidente Milei hace tres meses- a oponerse a las políticas de ajuste, a la falta de diálogo y de interlocutores válidos expresó su “solidaridad con él y con el pueblo chubutense, que al igual que La Rioja sufre la retención ilegal de los fondos que le pertenecen legítimamente y que están establecidos por ley”.

Sorpresivamente se sumaron orgánicamente los de Juntos por el Cambio: el más macrista, Jorge Macri, jefe de gobierno de CABA; los gobernadores Zdero (Chaco), Valdés (Corrientes), Frigerio (Entre Ríos), Sadir (Jujuy), Cornejo (Mendoza), Orrego (San Juan), Poggi (San Luis) y Pullaro (Santa Fe) en respaldo a Torres y exigiendo a la Nación que cumpla con la Constitución, la ley y los acuerdos con las provincias porque no castiga a los gobernadores sino a 50 millones de argentinos de las 24 jurisdicciones del país. Solo no se pronunció, el peronista Jaldo de Tucumán alejado de UxP; tampoco Passalacqua de Misiones, pero el mismo día presentó una demanda judicial contra el no envío de fondos.

“Nacho” Torres, a diferencia de Quintela, tiene diálogo directo con representantes del gobierno libertario. Días antes del ultimátum habló con Mauricio Macri, con Bullrich y hasta con el ministro de Economía Caputo. A todos les advirtió que iba a cortar el gas y el petróleo sino le enviaban los fondos. Unos ignoraron sus peticiones, otros le habrían dado piedra libre para actuar.

Lejos de escucharlo, el presidente Milei respondió por redes sociales insultándolo y responsabilizándolo de la pobreza de los argentinos.  Más oficial fue el comunicado de Presidencia donde niegan la deuda con Chubut y recurren al discurso de siempre: privilegios de la casta, despilfarro, no hay plata, que haga un ajuste, “chavistas”, etc, etc.

Quintela y Kicillof quedaron a tiro de los libertarios. Llama la atención que dos dialoguistas también. Rogelio Frigerio, de Entre Ríos y Jorge Macri de CABA, lo que podría entrever que la alianza Macri-Milei tiene dificultades. La reacción pone en evidencia que el ajuste perjudica a las provincias; también deja evidencias que un sector político quiere tomar por asalto el gobierno.

Ante este panorama, el futuro institucional del país aparece más que incierto. A menos de una semana del inicio de sesiones en el Congreso nacional, el próximo 1 de marzo, comenzara la cuenta regresiva para la permanencia del Decreto de Necesidad y Urgencia -DNU 70/2023- con que está gobernando ahora La Libertad Avanza el que de ser rechazado fortalecería la postura de los gobernadores y viceversa si es aprobado.

No se descarta la posibilidad de alguna embestida política contra el presidente, latente en sectores opositores y que pocos expresan abiertamente como es un juicio político. En tanto, el país sopesará el impacto del inicio o no de clases; nuevas subas de precios en supermercados, farmacias, transporte, cuotas de colegios privados, útiles escolares; de las tarifas de servicios básicos: gas y energía; dimensión de los paupérrimos aumentos a jubilados y pensionados; mísero 30 por ciento para salario mínimo con una inflación de casi 70 por ciento; acuerdos paritarios insuficientes en sectores económicos menos robustos; recesión económica, movilizaciones, huelgas y una probable nueva devaluación del peso que terminaría por licuar los ingresos de argentinos y argentinas, entre otras medidas que vienen empobreciendo a la población.

En ese contexto queda un jugador más por intervenir y que, no dio señales todavía. La Corte Suprema de Justicia de la Nación. Muchos amparos, pedidos de inconstitucionalidad, cautelares, per saltum, todos reclamos para que los “cortesanos” frenen o le den vía libre al ajuste. Se cree que la demora de los “supremos” tiene que ver con esperar que la política resuelva los problemas políticos, pero los tiempos se acortan y las necesidades de las provincias son más que urgentes.

Los libertarios atacaron a los gobernadores en redes sociales con frases como degenerados fiscales, golpistas, saqueadores, chavistas hasta altas horas de la noche liderados por Milei quien puso en el podio de las tendencias la divagante frase “principio de revelación” para atacar al chubutense.

Se trata de un principio que la economía usa para organizar la contabilidad de ingresos y egresos, pero que Milei explica como una teoría que le permite festejar como exitoso un fracaso. Así, festejó dejar expuestos una vez más a opositores -en este caso el chubutense- como defensor de “obscenos privilegios con una pobreza por las nubes”.

Un debate inconducente, no por ser en redes sino porque ahora no solo es la oposición peronista, kirchnerista o de izquierda sino los gobernadores radicales y los de Juntos por el Cambio. Más que operaciones para tener más poder, lo que hay que hacer es consensuar políticas sobre, la pobreza por ejemplo que, es cierto viene de antes, pero se potenció con este gobierno por eso la responsabilidad es mutua.