El reconocido cantante confirmó el vínculo indisoluble con su público en un recital que lo tuvo todo: lluvia, emoción, canciones sentidas y una gran voz interpretándolas.
El reconocido cantante Abel Pintos presentó el viernes en Vélez Sarsfield su nuevo show, titulado “Amores y Rarezas”, que entre viejos éxitos y nuevas canciones marcó el cuarto estadio de fútbol de una carrera musical que sigue confirmando con el cartelito de "sold outs" el vínculo indisoluble con su público.
El nuevo show de Abel Pintos trae consigo una dualidad interesante: por un lado, propone repasar los grandes hits que han forjado y sostenido el romance con su audiencia y, por otro, propone una serie de “lados B” que invitan a conocer otras facetas del cantante. Es por esta experiencia que Abel Pintos decidió llamarla “Amores y Rarezas”.
Sus más de 28 años de música hablan por sí solos: dueño de una convocatoria récord y presentaciones vibrantes entre las que incluye 21 shows seguidos en el Teatro Ópera y 12 recitales en el Movistar Arena, por citar algunos de los casos, completó este viernes su cuarto estadio de fútbol en lo que fue, sin dudas, otro hito en su carrera.
En la previa, y mientras sonaban las versiones de los himnos grabadas por Abel, la lluvia cayó con fuerza en el barrio de Liniers. Pero como en una señal, en un momento amainó para que el bahiense pudiera dar un show a la altura de las expectativas y, cerca de las 20.45, se encendieron las luces para el inicio tan esperado por la multitud pasada por agua.
La noche, que tuvo un total de 35 canciones, comenzó con ”Peregrinos”, “Solo” y “Sueño dorado”, configurando una jornada en in crescendo canción a canción que tuvo al público coreando todas las letras de comienzo a fin.
La versión de “Cactus”, canción de Gustavo Cerati, permitió a Abel entrar en uno los momentos salientes del recital, un pasaje muy sentido y de invocación a la leyenda de la música nacional. Otro de los puntos fuertes de la noche fue la sorpresa de “Tiene tu amor” junto a Luciano Pereyra como invitado.
Arriba, Abel tirando tantos pasos de bailes como cambios de vestuario; abajo, sus fans empapados pero acompañando el show de punta a punta. Esa fue la tónica que se mantuvo durante toda la jornada del viernes por la noche. Si al cielo de Liniers le faltó claridad, todo el brillo lo tuvo el vestuarista para que Abel luzca más con "outfits" con lentejuelas y otras telas relucientes.
Parte del espectáculo de la noche transcurrió también en las pantallas, con pequeños fragmentos audiovisuales en los que Abel contaba en un entrevista cómo se desarrolló el proceso de “Amores y Rarezas”. Un momento íntimo que ayudaba a imaginar el detrás de escena que llevó a Abel a soñar y concretar esta nueva gira.
La faena continuó con “3”, “El adivino”, “La hice llorar” y “Aventura”, con las que ya se acercaba el final de una noche que se extendió por más de dos horas con el hasta pasadas las 23.
No faltaron grandes éxitos como “Bailando con tu sombra”, “Cien años”, “Sin principio ni final” y “Once mil” por citar algunos.
Los shows de Pintos dejan la misma sensación: vas a encontrar un poco de todo para todos los gustos, siempre por supuesto con mucho de Abel Pintos.
Para entender el fenómeno del bahiense, Abel viene de otra gira como "La familia festeja fuerte" que abarcó 10 países, entre ellos España, México, Costa Rica, Colombia, Perú, Chile, Uruguay y Argentina, con un total de 36 conciertos que atrajeron a una impresionante audiencia de más de 100.000 personas.
Con una propuesta en el escenario que osciló entre la balada pop, el folclore y hasta algunos momentos más grooveros, se pudo ver una banda muy correcta que acompañó en todo momento al cantante a la altura de la circunstancias. Las visuales fueron otro aspecto destacado en el que se apoyó parte del concierto. Simple y efectivo. Muchas veces también, el medio es el mensaje.
Entre su performance vocal y la sensibilidad de sus letras con canciones teledirigidas es que se termina de entender el fenómeno de Abel Pintos, por qué puede llenar la cancha de Vélez y por qué es hoy en día uno de los principales exponentes del cancionero argentino.
Sobre el final, con el cantante muy emocionado, sonaron las últimas canciones: “El alcatraz”, “Revolución” y “Juntos”, no antes de meter un triple bis con “Motivos”, “De solo vivir” y por supuesto “Piedra libre”.
En el primero de sus dos Vélez -este sábado volverá a presentarse con entradas agotadas en el mismo lugar- Abel redondeó una noche soñada por muchos músicos pero que solo cantautores de su calibre pueden lograr. Un recital que lo tuvo todo: lluvia, emoción, canciones sentidas y una gran voz interpretándolas.
Fuente: Télam