Diario El Independiente || Edición Digital
Skip to main content

Trabajar por una inclusión real no es lo mismo que mirar de reojo

La situación económica por la cual estamos atravesando en todo el país, actualmente, nos hace más vulnerables a todos y a su vez nos sensibiliza más. Andamos estresados, nos peleamos verbal y físicamente entre nosotros, sufrimos accidentes por el grado de alteración y aceleración que llevamos. Es por esto que por medio de esta publicación quiero transmitir un humilde mensaje desde mi experiencia de vida:.



Debemos entender que esta etapa por la cual estamos transitando ahora es parte de un proceso de vida que a todos nos toca en algún momento, yo lo denomino la “Etapa de Crisis”; pero no debemos asustarnos ni tenerle miedo, al contrario, debemos ser fuertes y sobrepasar esta etapa a través de una mirada siempre positiva y aprender de todo lo bueno y lo malo para seguir por ese camino del Proceso. Todo esto nos hará aún más fuertes y sumaremos una nueva experiencia a nuestras vidas.

La persona con discapacidad permanentemente vive transitando estas etapas en sus procesos de vida, es por esto que considero que toda la sociedad debe estar concientizada y educada sobre esta temática, porque creo que todos en algún momento de nuestras vidas llegamos a poseer una discapacidad, ya que entiendo por discapacidad a la alteración física o emocional que nos dificulta (pero no nos impide) poder realizar con total normalidad cualquier acción.

En este sentido, reafirmo que hay muchas personas que miran de reojo, pero no trabajan por una verdadera Inclusión.

MI NUEVO PENSAR DE LA DISCAPACIDAD

En estos últimos años se viene generando un gran avance con el tema de la discapacidad en varios aspectos: en lo social, lo educativo, lo deportivo, lo laboral, entre otros, que aportan de gran manera a la concientización de un nuevo pensamiento: la inclusión entre todos.

En esta etapa es fundamental hacer un llamado a todos los actores sociales que cumplen un rol importante en cada población, como por ejemplo: las autoridades gubernamentales, los medios de prensa, los profesionales, los docentes, entre otros. Todos deben ser un eslabón de una gran cadena que debemos formar y que nos permita sostener y unir, para así generar,  esta verdadera “Inclusión entre Todos”.

Estas últimas palabras son muy abarcativas pero a la vez muy simples si realizamos nuestras tareas diarias con una mirada global y con mucho amor para con los demás y con nosotros mismo.

A veces a las personas o los distintos grupos sociales nos sensibiliza este tema cuando nos toca muy de cerca, por ejemplo: en Argentina en este último mandato presidencial la vicepresidenta Gabriela Michetti tiene una discapacidad y todos sus compañeros políticos de trabajo se vieron con la necesidad de trabajar fuertemente por la discapacidad. Pero no debemos esperar que suceda esto, como dije en la primera parte de este texto, a todos en algún momento nos toca de cerca o nos afecta directamente.

A partir de la difusión de mi libro “Menos es Más” pude transmitir un mensaje muy fuerte para toda la sociedad, donde sostengo que “la discapacidad no es un impedimento para nada de nada, sólo que debemos ponernos objetivos claros y no parar hasta poder cumplirlos”.

A mi entender deben aparecer más actores transmisores de este mensaje, más Emiliano, más Celeste Díaz, más Tomás Pasman, para poder ayudar e incentivar a muchas otras personas. La sociedad necesita multiplicar las personas referentes, las historias de vida para motivarnos a seguir adelante con las propias dificultades. Personalmente considero que la Vida es un Proceso, siendo este un camino que debemos transitar siempre con el sentido hacia adelante, ya que nunca es igual, hay crisis, obstáculos, cosas buenas y malas, pero de todo ello podemos aprender para sumar experiencias y seguir creciendo día a día.

Por esto les quiero transmitir con firmeza que “Nadie es menos que Nadie” y que de nuestra discapacidad o de la dificultad que se nos presente podemos construir una verdadera fortaleza para con nuestro Ser interior.

¿Qué estás esperando? Sumate. Desde tu lugar irremplazable podés ser, y estás llamado a ser, un actor más de esto tan necesario: la inclusión entre todos.

Emiliano del Rio Arquitecto- Docente en UNLaR