Dos agujas y un ovillo de lana serían la herramienta necesaria para un nuevo estilo de vida saludable..
Aunque para muchos pueda parecer una actividad propia de las abuelas, algunos aseguran que dos agujas es lo único que necesitás para poner a prueba la nueva moda en vida sana. Tejer ayuda a mejorar el estado de salud, según revela un estudio de Knit For Peace, la organización británica sin fines de lucro, que reveló sus múltiples beneficios tras una exhaustiva investigación.
Existen muchos motivos para engancharnos a esta afición: reduce la presión arterial, así como los niveles de depresión y ansiedad y retrasa la aparición de la demencia. Los investigadores señalaron que tejer puede ser igual de relajante que practicar yoga.
Knit For Peace nació de una serie de proyectos que creó la organización en Ruanda y la India, según cuentan en su página web. Y desde entonces, se ha convertido en una red que cuenta con más de 22.000 miembros de personas que tejen prendas para quienes lo necesitan. Luego de que algunos tejedores afirmaran que notaban cambios positivos en su salud, la organización comenzó a investigar acerca de los beneficios de tejer.
Participaron de la investigación un total de 1.000 miembros, y los resultados son asombrosos. El 70% de los participantes asegura que esta práctica ha mejorado su salud. Además, el 82% señala que tejer les ayuda a relajarse; un 65% dice que les hace sentirse útiles, y un 92% afirma que mejora su estado de ánimo. Las personas observadas, emplearon 13,5 horas a la semana tejiendo, aunque algunos dicen haberlo hecho durante 35 horas a la semana.
"Nuestra investigación revela que muchas personas experimentan beneficios al tejer. De hecho, resulta sorprendente que no exista más investigación al respecto", plantea Dame Hilary Blume, fundadora de la organización, y agrega: "A menudo se tacha esta actividad de anticuada, pero consideramos que debería promoverse, ya que resulta muy favorable para la salud".
Estudios anteriores revelaron que tejer reduce el ritmo cardíaco en unos 11 latidos por minuto, pues crea un estado de calma, lo que provoca además, una disminución de las hormonas del estrés y la presión sanguínea. Esta actividad manual, también contribuye a calmar el dolor crónico, porque la persona debe concentrarse en una actividad concreta. El movimiento repetitivo de mover las agujas mejora el estado de ánimo y estimula la liberación de serotonina, lo cual reduce la intensidad del dolor.
Katie Sorrel, una mujer canadiense, contó en 2016 su experiencia con el tejido al periódico The Hamilton Spectator. En aquel entonces aseguró que tejer la ayudaba a llevar una vida más saludable y a lidiar con la ansiedad. Explicó que antes de cumplir los treinta años se sentía muy estresada por el trabajo y decidió dejarlo para viajar. Anduvo por el Sureste Asiático y por Nueva Zelanda tejiendo constantemente y así pudo confirmar que es una tarea que "te permite concentrarte en una cosa enteramente positiva".
En 2015, las fuerzas armadas canadienses buscaron a personas que tejieran muñecos para niños sirios que llegaban como refugiados a Canadá. El proceso de tejer estos muñecos les generó una emoción muy positiva, posiblemente porque los tejedores sabían que su trabajo iba a tener un impacto social y un "efecto dominó", explica Shirley O'Connell, una de las organizadoras de la iniciativa, que generó un círculo virtuoso: hacer algo para el bien y a la vez sentirse mejor.
*conbienestar.com