El mejor aprendizaje (un granito de lo que dejó Tecnópolis Federal)
Punto de Encuentro de niños, adolescentes, jóvenes, adultos y adultos mayores; de conocimiento, arte, ciencia, cultura, tecnología y más; de esfuerzo, divergencia, individualidades, responsabilidades, grados de compromiso; de alegría, asombro, curiosidad, ansiedad, y otras emociones; de amigos, compañeros de escuela, de institutos, departamentos del interior provincial, de otras provincias, de familias..
Cada día, antes de las 10 (horario de apertura) ver esos rostros apoyando sus frentes en los vidrios por afuera de las puertas de acceso, hacerles “toc toc” con las guías mientras curiosean a ver qué hay adentro, ver esas sonrisas llenas de ansiedad y ganas por entrar, escuchar los aplausos de los adolescentes, cánticos, gritos de alegría, “el malón” que viene por el pasillo cuando se abren las puertas, alumnos/as, docentes, directivos, padres/madres, tantos…
Primer día no más se llenaron los ojos de lágrimas de emoción cuando vi a dos niños como de 8 años apoyados en la baranda de protección mirando hacia abajo, la parte central del Domo y esos “¡Mirá, qué impresionante!, ¿serán de verdad? [Por el mamut, rinoceronte y demás animales], ¿iremos hasta ahí? Están lejos.” Les pregunté de donde eran, una escuela de Chilecito y les dije “Chicos, si van a ir ahí y también a otros lugares que están afuera, en las carpas y a ver los dinos”. Esas caritas con ojitos abiertos de asombro y la sonrisa tan amplia no se me olvidan más. Salieron corriendo gritando “¡Seño, Seño!”. Y es una anécdota de tantas.
Son esas experiencias que quedan en la retina y la mente, experiencias que, tal vez, no se repitan para algunos/as pero pudieron vivirlas, disfrutarlas, conocer la capital de su provincia, realizar su primer viaje fuera de casa, fuera del contexto (rural y/o urbano), saber y conocer que hay mucho por descubrir, que hay un más allá que pueden soñar y que pueden alcanzar si así se lo proponen. Y lo cierto es que (los que somos docentes así lo sabemos) para nuestros/as alumnos/as, el mejor aprendizaje es el que se vive y más con la compañía y acompañamiento de Otro/s.
María Lorena Aldeco
Prof. en Psicología y Ciencias de la Educación
Esp. en Docencia Superior en Educación y TIC